martes, abril 05, 2011

Rostros.

Corrí mucho ese día de un lado a otro, sin pensar , solo en los pendientes por hacer, en mi salud que por ratos jodía , esa alergia por el cambio de clima, la garganta me recordaba los cigarros que fume una noche antes.
Al fin pude sentarme, tenía tanta hambre como para ponerme a elegir algún lugar especial, solo entré al primer lugar que encontré y pedí lo mismo de siempre. Lo disfruté como si se tratara de un gran manjar, por primera vez no me incomodaba el hecho de cenar sola, miraba de rato en rato a travez de la ventana, lo nublado que estaba Lima, la neblina había bajado lo suficiente como para respirar ese olor a mar, esa brisa que me permitía sentir nostalgia, simplemente sentir, invierno cercano, aunque lo mas probable fuera que al día siguiente en Chorrillos amaneciera soleado.
Yo estaba tan distraída entre la comida, la neblina y los mil pensamientos que rondan mi cabeza , osea pensando sin pensar cuando menos me di cuenta ya estaba camino a casa sin antes voltear a ver a aquella mujer que seguía mirándome desde que llegue, ordene , me senté y cene.

Desperté sin querer que mi sueño acabase, pero ya no había forma de retornar a ese punto en el que me quede...que extraño sueño.
Quise estirarme como de costumbre y dar vueltas de un lado a otro como aplastando la pereza pero fue imposible, me tope con su rostro, la mujer del sueño dormía junto a mi, mi cama ya no era tan mía.

Busqué en mi memoria su nombre, volví de nuevo a mirar esta vez más de cerca su rostro, era bello, delicado, eras tú, ¡claro que te conocía!...¿era posible caer en tus brazos nuevamente? No, no eras tú. Era otro rostro...que me recordaba a ti, o me recordaba el sentimiento que sentí, pero más puro. Una mezcla de anhelo...

Me encontraba ahora en un cafe, intentando que aquel  cafe me despertara completamente, pero era imposible que mi memoria no repasara una y otra vez aquel sueño, que extraño, dije para mi en voz alta.
Caminando cruzádome con distintos rostros, me detenía por segundos a mirar cada uno, pareciera como si intentaba buscar alguno que me diera una respuesta, alguno que pudiera reconocer, reconocerte.

Desperté violentamente, todo fue tan real ,su olor estaba en mis sábanas. En el aire. En mis manos. Mi brazo estiré, sin ver, para toparme con lo que temía,  con la realidad, no estabas acá, solo dormía yo y mi cama, las dos, sin ti.

Lo extraño es que su rostro,sigo, intentando, descrifrar.

5 comentarios:

  1. Qué lindo... puse la canción mientras leía y de verdad que lograste transportarme a ese sueño tan tuyo, tan personal y tan genuino que hasta pude oler el mismo café y sentir el vapor de la taza en mi cara.

    Me encanta cuando escribes siendo tan tú! Demostrando todo tu lado vulnerable ante algo tan vago como un sueño.

    Besos y espero que te encuentres con tu musa más seguido. Aunque sea en sueños.

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  2. No te llegó mi comentario anterior???????????????????????

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  3. Volvería a escuchar esa canción una y otra vez, me estremece en demacía. A quien tenga el dominio de tu blog, le ruego vuela a darselo a mi amiga, pues seremos muchas almas tristes pensando n no volverla a leer jamas.

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  4. La canción es muy bella y el post se lee con emoción, cuantas veces buscamos entre tantos rostros a esa persona que incluso en sueños vemos solo esperando que aparezca pronto en nuestras vidas..

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  5. Reconocer, es mi verbo favorito porque es el más palindromico que existe... lastima que no se conjugue facil.

    Sonrisas

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